No nos cansamos de hablar acerca de la continuidad de la empresa familiar. Sabemos que es fundamental para mantener su legado y su éxito a lo largo de los años. Sin embargo, como ya sabemos, esta continuidad no es automática y requiere de la formación adecuada de los sucesores o relevos generacionales.

En las familias empresarias es importante tener claro quién  liderará el relevo. No es un tema que se deba ir postergando, cuanto antes se aborde, mucho mejor, pero en muchas ocasiones esta cuestión no es tarea fácil puesto que no se tiene demasiado conocimiento acerca de la formación que deben recibir los sucesores.

De hecho, tan sólo un 15% de las empresas de familias tiene un programa formativo para sus accionistas y el 52% carece de un plan de sucesión para la propiedad. Y para seguir con cifras que nos llaman a la reflexión, el principal responsable de las empresas supera los 65 años de edad en el 30% de los casos.

No obstante, estas estadísticas no deben llevarnos al desánimo, muy al contrario, podemos verlas como una llamada a la reflexión y por consiguiente, a tomar medidas. Actuando a tiempo lograremos la continuidad del éxito en la empresa familiar.

La formación adecuada permitirá adquirir conocimientos, habilidades y actitudes necesarias para dirigir y gestionar una empresa prósperamente. También así, los sucesores tendrán una comprensión profunda y respeto por la cultura empresarial e identidad de su compañía.

La transmisión de valores y conocimientos de la empresa es esencial para evitar su dilución de generación en generación. La formación de sucesores también asegurará que la empresa cumpla con los requisitos legales y fiscales y garantizará su sostenibilidad en el futuro.

En resumen, la formación adecuada es crucial para preservar el éxito y la continuidad de una empresa familiar, y para asegurar que siga evolucionando y prosperando en el futuro. Es fácil para una empresa familiar perderse en la transición de una generación a otra, por lo que la formación a los sucesores será fundamental para evitar que esto suceda.

Si te ves reflejado en esta situación, te daré una buena noticia:

El plan relevo de TFAB es el primer paso de la solución. Se trata de una formación destinada a las próximas generaciones para que sitúen la empresa y sepan responder ante cuestiones estratégicas relevantes para la continuidad de la misma.

¡Todavía estás a tiempo de formar a los próximos accionistas y líderes de tu empresa familiar en temas de gobernanza corporativa y gestión empresarial!

Hasta pronto, y no olvides cuidar de ti y de los tuyos.

Si quieres más información al respecto, escribe un correo a bhernandez@tfab.es 

Beatriz Hernández Hernández

Directora Asociada de TFAB